Amarrada a mis ojos grandes
que orbitan lunas
congeladas
con aliento a sonámbula
intermitente
las sombras hacen
contrabando con mi espíritu
los espejos se
revuelven en bajada
una lechuza corrompida
hace contratos
esta noche
cuando apenas soy
un pijama y un pullover roto
que putean desde
la noteboock
y no entiendo
demasiado qué es real
y qué no
pero es real
que ya es domingo
y la tristeza ya
es un sin suerte
un sin oxígeno.
Pintura de Gregorio Negro