Una selva y un desierto en mi habitación
sin proverbios voy errante
sobre las venas de mi telar
a la noticia de reyes invertidos
que ocultan mensajes por debajo de la mesa
e instantáneas que dan mareo y nauseas,
no soy tan tonta
la inversión es una elección
que los comodines tienen en claro
pero ellos hacen reír
mientras que los otros hacen fastidiar,
muerdo los hilos
el tejido está listo
también mis animales.
Obra de Néstor Martínez