Misiones II

Los árboles trepan al sol sin quemarse

una historia se abre junto a la raíz y el hongo 

el agua es culpable de plantas y rocas poseídas

flores como mesas religiosas en porción inédita

la tierra roja, una intravenosa de cerros poblados 

hablan, quizá, desvergonzadas las chicharras

mi vestido gatea por el calor de los águilas

y la vibración

siendo víctima de los colores y las mariposas

de perros y gatos que abren y cierran y abren las puertas.


El Yaguareté todavía es una oscuridad alentadora

dulce para devorar mi multitud de estanque citadino. 



Cerro Azul, Misiones