Noche
sábado
se inflaman todos mis pecados
la sumersión no es suficiente
parece
que cualquier letra escapó de los brazos de esta casa
cualquier intento de amabilidad, también
tampoco hay teléfono ni horas ni cártel de fugitivo
sólo mi Fe
seducida por el vodka
el alcohol cicatriza con su juego
a la memoria sinvergüenza
de castillos incompletos
y bufones de papel
que una vez probé sin darme cuenta.
Salvador Dalí