Intravenosa

Una intravenosa encendida

para quien supo de mi torre y de mi fosa

se me abre el pecho en ladrido

y los ojos se me cierran y se abren 

para palear a un cobarde de fusil improvisado

a veces irreal 

a veces tan real como mis músculos

escucho la música de mis ancestros

afilada y condenada

en repeticiones sin ley limpia

agasajada por muertos que saben venderse.