Eureka

En mis esquinas

de destrezas y de berrinches

la soledad trepa hacia mi cama

lo negado balbucea

se reveló en la luz del velador

mientras traía la geometría de un hombre

¡eureka! 

para mis mujeres

que ahora acarician a un dragón

menos cruel que él 

hirvientes 

mueren y renacen esta noche

tal vez mañana también. 



Pintura de Estelle Barbet