Está nublado en mi inquietud felina
es la conmoción de esas falanges médicas
su diagnóstico y cóctel intravenoso
-resultados torpes y angurrientos-
pero mi Fe
de Espíritus parlantes, abiertos, generosos
mientras ruge el Yaguareté que me habita
y acepto el ciclo de marea trastornada
a pesar de los fotogramas de hospital
en el film de la semilla aturdida entre las rocas,
tengo el tajo en los pies
tengo las parábolas secretas.
Jesús y María Magdalena, compañeros.